Crítica de Cine (XV): Nueve vidas (2006)

UNA MUJER ES UNA MUJER

"Cada mujer es un universo". Esta sentencia de uno de los numerosos personajes de "Nueve vidas" (2006) es la clave de un filme que podemos calificar como prometedor. Ópera prima del director Rodrigo García, hijo del gran escritor Gabriel García Marquez, y cuyo mejor aval previo a esta puesta de largo, había sido la dirección de algunos capitulos de la serie "A dos metros bajo tierra" (lo cual no está nada mal, si tenemos en cuenta que se trata de uno de los mejores seriales realizados nunca en la historia de la TV).

El filme está estructurado en nueve partes, como nueve relatos breves con el nombre de la mujer protagonista. Se trata de relatos muy intimistas, es un cine hablado, de muchas palabras y de actores, grandes actores (Glenn Close, Holly Hunter, Joe Mantegna, Robin Wright, etc..). No todos los relatos tienen el mismo nivel, a la naturalidad de unos, se le añade para su desgracia la artificiosidad de otros. A pesar de todo, el conjunto no queda mal del todo, y García es capaz de componer un lienzo más que estimable sobre la mujer americana contemporánea.
Si, porque de eso se trata, de la mujer y nada más que de la mujer. De sus diferencias, virtudes y defectos. De diseccionar con agudeza todos los posibles roles: madre, esposa, amante, hija, adúltera. Sobre la imposibilidad de vivir sin ellas y la dificutad de estar junto a ellas. La mujer, ese misterio insondable que el hombre, creo, aún no ha sido capaz de desvelar.
Y así, mediante breves narraciones en forma de situaciones cotidianas, expone toda una serie de conflictos en los que la mujer es, con frecuencia, fatal protagonista. A saber, los maltratos, la enfermedad, la separación de los hijos, el amor de juventud y otros males del catálogo de la vida moderna. Ni más ni menos, lo cual es mucho en los tiempos que corren.

La opción estética es variada y atractiva, y la técnica, aunque no es novedosa, es absolutamente fascinante. Me refiero al uso del plano-secuencia en todos los relatos. Repito, no es novedoso. Desde que Orson Welles lo institucionalizara en aquel antológico filme titulado "Sed de mal" (1958), muchos son los cineastas que han optado por él aunque con suerte desigual. Sin embargo, García, sale bien parado del envite y consigue un tono realista y una intensidad dramática muy meritoria. Estamos, por tanto, ante el nacimiento de un director interesante, que promete una filmografía igual de interesante en el futuro. Ojalá el filme pueda servir, no solo para emocionar, sino para entender que más allá de la guerra de sexos, o de los conflictos domésticos, la mujer del primer mundo es muchas veces la prisionera injusta de un modo de vida denigrante y atroz.

FICHA TÉCNICA:

Dirección y guión: Rodrigo García.País: USA.Año: 2005.Duración: 114 min.Género: Drama.Interpretación: Kathy Baker (Camille), Amy Brenneman (Lorna), Elpidia Carrillo (Sandra), Glenn Close (Maggie), Stephen Dillane (Martin), Dakota Fanning (Maria), William Fichtner (Andrew), Lisa Gay Hamilton (Holly), Holly Hunter (Sonia), Jason Isaacs (Damian), Joe Mantegna (Richard), Molly Parker (Lisa), Sissy Spacek (Ruth), Robin Wright Penn (Diana).Producción: Julie Lynn.Producción ejecutiva: Alejandro González Iñárritu.Música: Edward Shearmur.Fotografía: Xavier Pérez Grobet.Montaje: Andrea Folprecht.Diseño de producción: Courtney Jackson.Vestuario: Maria Tortu.