17 septiembre 2007

Cinema Revival (LI): Monsieur Verdoux (1947)


MÁSCARAS DE LA DOLOROSA VERDAD

Para muchos entendidos y críticos especializados, “Monsieur Verdoux” (1947) es la mejor película de Charles Chaplin. Esto es mucho decir porque la filmografía de este cineasta y actor trasciende al propio arte cinematográfico. Cada uno de sus filmes es un manifiesto humanista sobre los dramas y conflictos del hombre contemporáneo con envoltorio lúdico-festivo. No hay en la obra de este genio una sola escena prescindible pero si parece cierto que “Monsieur Verdoux” posee rasgos propios a pesar de que en sus formas mantiene la consonancia con el conjunto de la obra de su autor.
Con guión del propio cineasta basado en las peripecias del famoso asesino de mujeres Landrú. Chaplin elabora una farsa de profundo calado, una sátira hiperbólica sobre la condición humana en la que el artista-payaso se erige en pensador indómito de una época convulsa. ¿Si la diplomacia conduce a la guerra, pueden los negocios llevar al crimen?, ¿por qué aceptar la legitimidad de la primera y repudiar al segundo?. Estas son algunas de las cuestiones que Chaplin trata de analizar en este filme, entre gags y gestos. Gestos exagerados de ese rostro que será Charlot por toda la eternidad, máscara inmortal del otoñal mimo, máscara que grita dolorosas verdades ante la absorta mirada del espectador.
Filme tremendamente condicionado por el clima de desazón moral que supuso la II Guerra Mundial. Chaplin sostiene aún, después de “El gran dictador” (1940) el estandarte de la ética obligada del humanista, del pacifismo como paradigma y esperanza de un futuro tremendamente incierto. A diferencia de sus otros filmes siempre impregnados de la profundidad, la reivindicación casi militante y su aplastante honestidad. En “Monsieur Verdoux” Chaplin es el rostro mayúsculo que rebosa un rabioso inconformismo y ejecuta una directa acusación a los poderes políticos y las elites sociales y adineradas de los males que afectan a la humanidad. Es un sistema injusto y desigual el que empuja al individuo a delinquir y a asesinar. No es el individuo, por propia iniciativa, el que se decide a apretar el gatillo contra sus semejantes. Con esta tesis Chaplin se situaría más cerca de Rousseau que de Hobbes.
Mirando atrás, al siglo XX, se diría solo con un vistazo a la prensa que poco hemos aprendido y por ende, que conviene reivindicar con fuerza titánica este filme de Chaplin. Todos los filmes de Chaplin. Y es que su indudable relevancia artística solamente es comparable a su bagaje humanístico trufado de valores vitales para la convivencia armoniosa de los hombres. ¡ Chaplin forever!


FICHA TÉCNICA:

Título Oríginal: Monsieur Verdoux Año:1947 Duración:123 min.Director: Charles ChaplinGuión: Charles Chaplin Música: Charles Chaplin Fotografía: Rollie Totheroh, Curt Courant, Wallace Chewing (B&W) Reparto: Charles Chaplin, Martha Raye, Marilyn Nash, Isobel Elsom, Robert Lewis, Mady Correll, Allison Rodell

4 comentarios:

Anónimo dijo...

exquisita obra maestra

Anónimo dijo...

Increible disertación sobre el crimen en la humanidad. "Si matas a uno eres un asesino si matas a millones eres un héroe". Tan fresca como si hubiera sido hecha ayer

Anónimo dijo...

pues si se notan las ideas de Orson Welles, otro que tampoco era manco

Anónimo dijo...

Cada vez que veo una pélícula suya por primera vez me sorprende. He conocido sus largometrajes recientemente y me asombra la modernidad que mantienen. Además siempre me deja con una sonrisa en los labios al final de ellas y carcajadas aunténticas durante su visionado. Chaplin es maravilloso...