24 abril 2008

Crítica de Cine (LXXII): Cometas en el cielo (2007)


CUENTOS DE KABUL

Bienintencionado. Hay ultimamente un cierto cine con buenas intenciones. Es un cine limitado en su pensamiento pero rebosante de bondad, incluso de una agradable ingenuidad. "Cometas en el cielo" (2007) de Marc Forster estaría incluído en ese tipo de cine. Filmes, primordialmente basados en obras literarias de mayor o menor recorrido,en el que la imágen está supeditada al entramado narrativo y las palabras tienen más peso que el montaje. A pesar de estas taras, hay razones evidentes para su ejercer su visión.
Basada en la novela de Khaled Hosseini, Forster, como el propio autor de la novela, parte de una evocación nostálgica: aquel Afganistán emergente anterior a la invasión sovietica de 1979 pasando por el periodo talibán post-11 de septiembre. Una odisea colectiva, un remiendo de país, al que ni la propia ficción le otorga visos de realidad.
El filme está dividido en dos partes claramente diferenciadas. En la primera, un largo flash-back nos descubre las ilusiones de una nación y la infancia díficil de unos protagonistas por causa de las desigualdades sociales y las discriminaciones raciales y de casta (muy arraigadas por aquellos lugares). De fondo, una experiencia traumática que es la metáfora de los días oscuros que vendrán. Un trauma que lo cambiará todo. En la segunda parte, el protagonista viajará de nuevo a aquellas localizaciones de su pasado para encontrar el amor perdido y la redención a través de un niño. Un niño que simboliza el futuro y la esperanza de un pueblo que aún grita angustiado por la paz.
Cinematograficamente correcta, con una fotografía luminosa, una música excelente (del español Alberto Iglesias) y una puesta en escena muy clásica, "Cometas en el cielo" plantea la reconciliación y el diálogo tangible entre fe y cultura para restablecer los errores y la mutua incomprensión. Se echa de menos una profundización y un análisis más detenido sobre las culturas afganas y paquistaníes. No obstante, se nota que su director es occidental y que el autor del libro es un exiliado cuya memoria se encuentra mediatizada por el estigma agridulce de la vivencia transcurrida.
Es por tanto, un filme que no aporta nada nuevo al cine excepto la redundancia de un mensaje importante. ¿Redundancia necesaria? Creo que sí. Pues si la banalidad y la irrelevancia que nos inundan día a día es tan persistente, no veo la razón por la cual la ética sencilla, aunque no venga acompañada de un discurso más radical desde lo artístico, pueda martillear las puertas de nuestra cotidianidad. Abramos la puerta de una vez.

FICHA TÉCNICA:

Dirección: Marc Forster.País: USA.Año: 2007.Duración: 122 min.Género: Drama.Interpretación: Khalid Abdalla (Amir), Homayoun Ershadi (Baba), Zekiria Ebrahimi (Amir de niño), Ahmad Khan Mahmoodzada (Hassan de niño), Shaun Toub (Rahim Khan), Nabi Tanhua (Ali), Ali Danesh Bakhtyari (Sohrab), Saïd Taghmaoui (Farid), Atossa Leoni (Soraya), Abdul Qadir Farookh (general Taheri).Guión: David Benioff; basado en la novela "Cometas en el cielo" de Khaled Hosseini.Producción: William Horberg, Walter Parkes, Rebecca Yeldham y Bennett Walsh.Música: Alberto Iglesias.Fotografía: Roberto Schaefer.Montaje: Matt Chessé.Diseño de producción: Carlos Conti.Vestuario: Frank Fleming.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me gustó mucho, bueno, incluso lloré. Creo que no la trta usted muy bien

Running is Life dijo...

bueno, me gustó... pero no considero que sea un filme 5 estrellas, un filme inolvidable