13 enero 2007

Crítica de Cine (XXIII): Banderas de nuestros padres (2006)




HÉROES DE FOTOGRAFÍA

¿Es verdad que en cada soldado hay un héroe?, aún más, ¿realmente existen los héroés?, y de ser así, ¿son necesarios?. Estas son algunas de las preguntas que se hacen en la esperádisima última pelicula de Clint Eastwood: "Banderas de nuestros padres" (2006). Esta incursión en el género bélico es sin ninguna duda, otro acertadísimo filme de una de las grandes leyendas vivas del séptimo arte (no en vano es reconocido como "el último clásico"). Y a pesar de que, tal vez, no alcanza el nivel de sus dos últimas y multipremiadas obras (maestras) "Mystic River" (2003) y "Million Dollar Baby" (2004), habrá de quedar con el tiempo en el conjunto de su brillante filmografía como una de sus más sentidas peliculas.
Partiendo de la aclamada fotografía, ya convertida en icono del siglo XX, realizada por el fotógrafo Joe Rosenthal en la cima del monte Suribachi cuatro días después del desembarco norteamericano en la isla de Iwo Jima, se cuentan las vidas de tres de los soldados fotografiados. Curiosamente los que pudieron sobrevivir a uno de los episodios más sangrientos de la II Guerra Mundial. A partir de aquella inmortal imágen, de aquel instante que ya quedará en la eternidad, Clint Eastwood establece dos procesos.
En primer lugar, realiza una rigurosa y documentada reconstrucción histórica que trasciende al propio acontecimiento bélico. Se ve con claridad que se han manejado fuentes documentales verídicas. Mucha culpa habran tenido los guionistas William Broyles Jr. y el oscarizado Paul Haggis. Se muestra el periodo previo al desembarco, la cruenta lucha en la isla y sobre todo, las consecuencias posteriores que la celebérrima instantánea tiene para los protagonistas una vez que ésta sale a la luz en todos los periódicos del mundo.
El segundo proceso, pero no por ello menos menos importante, es la deconstrucción de la mentalidad y los valores del combatiente así como de la propia sociedad civil que concibe la guerra con un planteamiento maniqueista fuera de la realidad. Se desmontan los mecanismos y resortes del héroe en su sentido tradicional. Habría que decir que Eastwood, convencido Repúblicano, introduce un discurso a contracorriente en un país cuyo panteón de héroes es infinito. ¿Meritorio?. Digamos mejor saludable y necesario. Es grandioso que un cineasta apunte a temas tan cruciales y actuales como aquellos pertenecientes al imáginario colectivo de la nación que le ha visto nacer y salga indemne del desafio. Para Eastwood, los héroes no son más que una construcción de nuestras mentes, una necesidad, la posibilidad de creer en lo extraordinario. Ni más ni menos.
Profundamente influida estética y técnicamente por "Salvar al soldado Ryan" (1998) de Steven Spielberg (casualmente productor de ésta), no llega a transmitir su hiperrealismo, tal vez porque Eastwood no desee transmitir un horror ya conocido. En ese sentido opta por la sobriedad evitando que el filme atrape desde lo emocional cuando su verdadera intención es que enganche desde el intelecto. En cambio si subyace la voluntad de introspección (mucho plano corto, primeros planos y muchas expresiones y rostros confundidos). Es decir, la de explorar las inquietudes vitales de unos protagonistas fascinados por una fama que no han solicitado y que les supera dramáticamente. Aquí, "Banderas de nuestros padres" se acercaría respetuosamente a otro "clásico" reciente del género con anhelos espirituales: "La delgada línea roja" (1998) de Terrence Mallick.
En conclusión, un filme esencial que representa perfectamente la evolución de su creador. Un creador inmenso capaz de insuflar a cada nuevo filme más sustancia intelectual y complejidad que en experiencias anteriores. Un filme, en fin, sobre el respeto a la Historia y a los antepasados, que muestra la vil manipulación y la propaganda de los poderes políticos, que demuestra que no hay heroicidad consciente ni planificada en el campo de batalla, que capta con dramatismo el remordimiento de sobrevivir a lo que muchos no pudieron y que el Arte (con mayúsculas), para bien o para mal, puede surgir por accidente o por casualidad. La foto de Rosenthal como otras grandes obras, esconde la historia digna de los hombres en un contexto y una época. ¿Héroes?, solo los que resisten el paso del tiempo y la cotidianidad infernal sin traicionarse a sí mismos.

FICHA TÉCNICA:

Dirección: Clint Eastwood. País: USA. Año: 2006. Duración: 132 min. Género: Drama, bélico.Interpretación: Ryan Phillippe (John 'Doc' Bradley), Jesse Bradford (Rene Gagnon), Adam Beach (Ira Hayes), Barry Pepper (Mike Strank), John Benjamin Hickey (Keyes Beech), John Slattery (Bud Gerber), Paul Walker (Hank Hansen), Jamie Bell (Ralph Ignatowski), Robert Patrick (coronel Chandler Johnson), Neal McDonough (capitán Severance), Melanie Lynskey (Pauline Harnois). Guión: William Broyles Jr. y Paul Haggis; basado en el libro de James Bradley y Ron Powers. Producción: Clint Eastwood, Steven Spielberg y Robert Lorenz. Música: Clint Eastwood. Fotografía: Tom Stern. Montaje: Joel Cox. Diseño de producción: Henry Bumstead.Vestuario: Deborah Hopper.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

La vi ayer y me pareció tediosa. Nada de lo que usted habla ahí.

Anónimo dijo...

Ni tanto ni tan poco.No me interesa esa peli

Running is Life dijo...

Debo decir que serámejor que reviseis la filmografía de este cineasta y luego os dediqueis a opinar con un criterio más fundamentado.

Anónimo dijo...

Gran película.No estoy de acuerdo con sus críticos.Gracias a películas como esta mucha gente joven está empezando a enterarse de lo que fue la Segunda Guerra Mundial,la cual,nos guste o no,tuvo una enorme influencia en los acontecimientos histórico-políticos del siglo XX y lo que va del XXI.La única manera de no cometer los mismos errores que nuestros antepasados es aprender de la historia.Así comprenderemos la brutalidad del exterminio nazi o la salvajada de tirar dos bombas atómicas en dos grandes ciudades matando a cientos de miles de civiles......

Running is Life dijo...

Le agradezco sus fundamentados comentarios y espero fervorosamente que los demás visitantes entiendan nuestro punto de vista.

Anónimo dijo...

Bravo, cómo no está usted en alguna publicación donde más personas puedan tener el placer de leerle

Anónimo dijo...

Le daré una alegría Señor Silverman...cuando visione Letters from iwo Jima, Doris promete hacerle una fotografía con Clint cuando éste reciba su estatuilla dorada...Mientras tanto, le dejo con unas recientes declaraciones de su amigo republicano...(Pinchar link)

http://elcomerciodigital.hoycinema.com/actualidad/noticias/GENTE-Clint-Eastwood-considera-absurda-intervencion-EEUU-Irak.htm