Cinema Revival (XXV): El malvado Zaroff (1932)

CAZADORES Y PRESAS

Cuando el arte ha optado por representar lo sobrenatural, éste parece siempre poseer un cierto halo festivo, de evasión. Sin embargo, la representación de lo extraordinario en la existencia humana es, con frecuencia, una oportunidad para exponer problemáticas vitales y conflictos de toda índole y variedad en forma de soberbias y acertadas metáforas. De esta manera y pese al largo tiempo transcurrido, la revisión de "El malvado Zaroff" (1932) de Ernest B. Schoedsack e Irvin Pichel, sigue siendo una experiencia excitante y nueva. Un hito dentro de su género que esconde entre sus imágenes poderosos juicios de pensamiento sobre lacondición humana.

Perfectamente estructurada en tres partes, la primera supone un establecimiento de la acción, presentación del protagonista (Joel McCrea) y presentación básica de las premisas antropológicas en las que se moverá la pelicula. La segunda parte corresponde a la llegada a la isla del Conde Zaroff, noble ruso huído de la Revolución de aquel país y amante (como el citado protagonista) de la caza. Finalmente, un tercer bloque, el más excitante de todos, en el que se muestra como nunca la caza de un ser humano.

Se trata, sin temor a equivocarnos de una obra maestra del género. Las causas de semejante apreciación se deben a que asistimos, más de setenta años después, a un filme irrepetible que resiste el paso del tiempo. Resulta significativa y extraordinaria el uso tan maduro del lenguaje cinematográfico (no hay que olvidar que estamos saliendo aún del mudo), con travellings desorbitantes, excelente planificación de planos, uso tremendo del primer plano tratando de explorar en la psicología de los personajes, montaje de pulso narrativo tenso y excitante y buenos actores como la actriz Fay Wray (antes de ser la novia de King Kong).

Pocas veces se ha rodado con tanta crudeza el ansia de un ser humano por matar a otro. La pelicula da pie a la siguiente reflexión: ¿es posible que el rol del cazador pueda ser modificado según las circunstancias y que éste se convierta en presa?, ¿hay diferencia entre cazar a un hombre o a un animal?, ¿es más civilizado?, ¿menos?. Lo cierto es que son muchas cuestiones, jugosas las posible lecturas y es díficil contar más en 63 minutos. Dije bien, solamente algo más de una hora. Tal ejercicio de concisión abruma en nuestras larguísimas jornadas de cine actual.

FICHA TÉCNICA:

Título Original: The most dangerous game Director: Ernest B. Schoedsack, Irvin Pichel
Reparto: Joel McCrea, Fay Wray, Robert Amstrong, Leslie Banks, Noble Johnson y Steve Clemento Año: 1932 Nacionalidad: USA