16 marzo 2007

Cinema Revival (XXX): Los Paraguas de Cherburgo (1964)



PROMESAS DE AMOR QUE LA LLUVIA ARRASTRÓ

Plano cenital. La lluvia fría cae sobre Cherburgo y nada será igual. El aguacero cae enorme sobre Normandía y es metáfora elegíaca del irremediable amor perdido. Inmortal metáfora que con elegante nostalgia de toda nuestra juventud y melancolía de lo irrecuperable supo mostrar Jacques Demy en su gran obra maestra “Los Paraguas de Cherburgo”(1964). Demy, uno de los vástagos injustamente menos reconocidos de aquella mítica cuadrilla encabezada por Godard, Truffaut, Chabrol, Resnais y Rivette, estableció por sí mismo la modernidad en el cine. Un Demy que entabló un idilio con un cine moderno de rasgos muy propios y reconocibles en su persona: un artista de grandes convicciones y complejidad influenciado por el musical americano y un virtuosismo asombroso moviendo la cámara.


“Los Paraguas de Cherburgo” es un musical cantado de principio a fin. Audaz experiencia nunca repetida con posterioridad. Se reinventa un género para situarlo en la cumbre del arte. Pero no todo acaba ahí, también es la dolorosa historia de amor juvenil entre Guy (Nino Castelnuovo) y Genevieve (Catherine Deneuve). Y el relato, al ritmo inspirado de la partitura de Michel Legrand nos remite a nuestros desengaños más íntimos. De fondo y también por primera vez, la abierta discusión sobre una cruenta guerra en Argelia. Y es que son los caprichos de un injusto conflicto los que han de separar a los amantes. Ya no pasearán por las calles coloreadas de Cherburgo ideadas por el director artístico Bernard Evein. Ya no pasearán ese romanticismo fatalista, aquellas promesas de amor eterno, palabras que soñaban anhelantes un corazón, y se marchitaron en medio del tiempo, vencidos por la rutina, todas arrastradas sin piedad por la incesante lluvia normanda.
Demy, tachado de intelectual cursi, es capaz de mostrar en medio de lugares idílicos más propios de un sueño, la sensación realista de unas vidas sufrientes ya para siempre pensando en lo que pudo ser y no fue. Se trata de un cine de pulsiones sentimentales para los que la existencia no son más que un montón de encuentros, ya casuales ya planificados. Cine de vidas en medio de un tiempo fugaz y una irrecuperable juventud. Cine que, en fin, suspira y supura más cine en medio de un puñado de escenas inolvidables. ¡Triste corazón corriendo bajo la lluvia normanda buscando el amor que marchó a la guerra!.

FICHA TÉCNICA:

Título Oríginal: Les parapluies de Cherbourg Año: 1964 Duración: 88 min. Director:
Jacques Demy Guión: Jacques Demy Música: Michel Legrand Fotografía: Jean Rabier
Reparto: Catherine Deneuve, Anne Vernon, Nino Castelnuovo, Ellen Farner, Jean Champion, Marc Michel, Mireille Perrey

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Joder qué emoción!!!!!!

Anónimo dijo...

pues sí, impresionante filme que descubrí hace muy poco. Se me pone la carne de gallina solo de recordarla

Anónimo dijo...

bravo Demy, y bravo la nouvelle vague. Dicho sea de paso, el señor jacques demy estaba casado con la insigne cineasta Agnes Varda. Toda una autora de culto.

Anónimo dijo...

bravo Demy, y bravo la nouvelle vague. Dicho sea de paso, el señor jacques demy estaba casado con la insigne cineasta Agnes Varda. Toda una autora de culto.

Anónimo dijo...

y que lo digas