Crítica de Cine (XXXVI): Cuando se rompieron los diques (2006)

EL RUIDO Y LA FURIA

Asegura un dicho popular que "En la casa del herrero, cuchara de palo". Dicha sentencia resume con fidelidad la catástrofe del huracán Katrina acontecida un 29 de Agosto de 2005 de infausto recuerdo. Y aunque seguro que habrá quien asegura que hay tragedias tan enormes cuyas bíblicas proporciones y horribles consecuencias son imposibles de preveer, también están los que piensan, una amplia mayoría, que en el país que se jacta de ser la Primera Potencia económica y mundial no puede concebirse un horror como el que asoló la ciudad de New Orleans en aquellos días. Entre estos últimos está el controvertido cineasta Spike Lee.

"Cuando se rompieron los diques" (2006) es un filme documental en el que Lee retoma la catástrofe con un rigor y una precisión inconcebibles hasta entonces en este tipo de producciones. No sorprende para nada que el director afroamericano, uno de los rebeldes y radicales más inconformistas de la industria, diseccione en cuatro actos el suceso del Katrina. Comenzando con la sucesión cronológica de los hechos, pasando por por un minucioso análisis de las causas y las consecuencias hasta llegar a los responsables políticos. Mientras tanto, y de manera transversal, Spike Lee muestra el dolor de una comunidad de ciudadanos considerados de segunda clase, la mayoría de raza negra, abandonados a su suerte por sus instituciones. No nos engañemos, en la meca del jazz solamente se quedaron aquellos desposeídos de todo lo necesario para vivir con dignidad. Lo realmente sonrojante es que son masiva legión.

Se expone brillantemente todo el material de archivo del momento intercalado con multiples entrevistas de afectados y responsables. No hay muchas concesiones a la diplomacia. Se habla clarito y sin muchos tapujos. En esto Lee es honesto. Es un hecho que las instituciones estatales y federales incurrieron en errores de prevención y no estaban preparados para afrontar una situación como aquella. Pero sobre todo, Lee carga las tintas contra la administración Bush. Una administración absolutamente invisible, más pendiente de su elite económica y de los lamentables estropicios de Oriente Medio que de sus propios ciudadanos. Significativo es cuando el actor Harry Belafonte, residente en New Orleans, elogia a Venezuela y a Hugo Chavez después de que éste haya ofrecido ayuda humanitaria.

Poco más se puede decir sobre un documental imprescindible para conocer la peor versión de un país que arrastra una crisis ética de díficil resolución. Nunca ha sido tan evidente la inexistencia del Estado, el abandono de los pobres y la ineficacia sangrante en donde se supone que los recursos disponibles son ilimitados. Las heridas han sido tan profundas que tardarán en cicatrizar. Necesitará de todo el talento, de todo el jazz del mundo y de toda la solidaridad posible de una comunidad comprometida. De lo contrario, no solo se romperán los diques del lago PontChartrain, también los de la honestidad pisotedada en la casa del venerado Louis Armstrong.

FICHA TÉCNICA:

WHEN THE LEVEES BROKE: A REQUIEM IN FOUR ACTS is a Spike Lee Film and a 40 Acres & A Mule Filmworks Production. Directed and produced by Spike Lee; producer and supervising editor, Sam Pollard; cinematography, Cliff Charles; editors, Geta Gandbhir and Nancy Novack; composer, Terence Blanchard; line producer, Butch Robinson. For HBO: supervising producer, Jacqueline Glover; executive producer, Sheila Nevins.