En el momento cumbre,
el instante importante,
el clímax,
todos de espaldas,
nadie miraba.
Se hizo el silencio.
Espectáculo breve
de largas consecuencias,
algunos se giraron,
otros aplaudieron,
pero el bullicio no se detiene
y la vida continúa.
El hombre se
convirtió en simulacro,
el simulacro en sombra,
la sombra en esbozo
que respira y palpita
una cierta esperanza,
o un tenue reflejo de algo
que remotamente
soy YO.
5 comentarios:
sigues siendo tan jodidamente bueno que en tus peores días nos hacees feliz con tu talento
triste pero saldrás . Hay cosas peores
Ritmo que parece carrera de fondo; y aunque toque fin, no cesa. Genial, vertiginoso!
Salu2 !
como a Diebelz, hay algo que enchufa con una fuerza sublime. Un chute de dolor en vena...
Lo más importante está ahi, el YO. Eso es lo más bonito que tenemos, y lo tenemos que cuidar. Hay momentos duros, de sombra, de silencio,... Si, pero no podemos quedarnos ahi y olvidar los otros momentos de cumbre, de aplausos, de reconocimientos,.. No podemos olvidar el valor de la vida y de nuestro YO. Es nuestro gran tesoro.
Eva
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