18 octubre 2006

EDUCACIÓN: Problemas de discíplina y aprendizaje (I)


Es justo y necesario comenzar esta reflexión asegurando tajantemente que los problemas principales del sistema educativo, tanto disciplinarios como de aprendizaje, trascienden claramente el ámbito escolar. Esto es lo mismo que decir que la escuela, en su intento de estudiar e intervenir en estos problemas, debe tener claras sus limitaciones. La escuela ha de considerarse a sí misma un factor importante para la resolución de estos problemas. Sin embargo, nos enfrentamos a problemas muy complejos, y la escuela ni puede, ni debe erigirse en la única solución posible. Se hace necesaria la participación de otros “actores” importantes en el tejido social y educativo como las familias, la comunidad, las instituciones públicas, servicios sociales, etc.
Creo sinceramente que la educación vive hoy un momento realmente apasionante. Apasionante porque nos enfrentamos a una realidad educativa inédita y compleja, no solo en nuestro país, sino también en los de nuestro entorno. Si atendemos al Informe Anual de Datos y Cifras para este curso 2005-2006 publicado por el Ministerio de Educación y Ciencia, España ha alcanzado la plena escolaridad entre los 4 y los 15 años, lo cual es un logro notable. Además, cada curso hay un aumento de los alumnos matriculados en los niveles de infantil y primaria y ligeros descensos en el resto de los niveles no universitarios debidos básicamente a la reducción de la natalidad. Este hecho se ha paliado en parte con la irrupción, cada vez en mayor cuantía, de alumnos inmigrantes causado por los últimos procesos de regularización (la cifra ha aumentado y se encuentra en estos momentos rondando el medio millón de matriculas y representando un 6,5% del total del alumnado no universitario). Los números son algo fríos, pero en verdad representan una realidad tan compleja y abrumadora que el desafío que se plantea, se hace inalcanzable por momentos. Y no parece claro cuál es el camino más adecuado para atender con garantías esta situación y paliar las deficiencias de la escuela, y con ella todos los problemas de disciplina y aprendizaje que se originan en su seno. Por tanto, es éste un camino de incertidumbre y tinieblas donde, a duras penas, alcanzaremos a ver tenues haces de luz si seguimos igual que ahora.
Las posibles soluciones a este conflicto pasan, sean cuales sean las medidas, por una articulación fuerte del entramado social y escolar y por la voluntad de todos (desde el alumno y el maestro hasta el tecnócrata o político de turno) aquellos involucrados en la cotidianidad de la acción educativa y comunitaria.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Sr. Silverman ¿Quién le pone el cascabel al gato?, usted mismo está fuera del sistema.La realidad es más bien siniestra

Anónimo dijo...

Eso digo yo

Anónimo dijo...

El cascabel al gato se lo tenemos que poner entre todos,especialmente las familias y los profesores.Nada se puede hacer si el profesor no se implica.Menos aún si la familia piensa "que los eduquen en el colegio".Algún día se hará un estudio en el que se descubra el motivo por el cual una generación que recibió una enseñanza en la cual el maestro era respetado y tenía una gran autoridad moral(la de los actuales padres) ha decidido que el profesor de hoy no sirve, no sabe y además "le tiene manía al niño".Por último, decir que las últimas reformas educativas deben haber sido diseñadas por gente que no ha dado clase a niños ni a adolescentes en su vida.Lo único bueno de tocar fondo es que ya no se puede ir más hacia abajo...

Anónimo dijo...

Muy lucida esa reflexion Sr. MG quin. Aquella generación en muchos casos lo único que quiere es aparcar al niño en la escuela. Se aburrieron de ser padres antes de serlo

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo en que las reformas políticas actuales están hechas por gente, seguramente tecnócratas, que están alejados de la realidad escolar. vamos camino del desastre y no quiero ser pesimista. De lo que tenemos ahora al detector de metales hay solo un paso. O incluso algo que no conocemos y de lo que hablaré en esta sección proximamente: la desescolarización o "Unschooling".