24 abril 2007

Crítica de Cine (XXXIX): Capturing the Friedmans (2003)


LAS COSAS QUE NUNCA SUPE DE MI PADRE


Habrá que convenir sin ningún asomo de duda al respecto que "Capturing the Friedmans" (2003) de Andrew Jarecki es una Obra Maestra sublime. Repito, asistimos con asombro a un producto de gran rigor, seriedad, justa emotividad y grandioso realismo. Todas estas cualidades la convierten no solo en uno de los descubrimientos de los últimos tiempos (que ya es mucho viniendo de un género tan laureado como el documental) sino en el rupturista y revolucionario punto sin retorno en su género.
Por tanto, habrá un antes y un después en este melancólico canto a las ilusiones perdidas que supone el retrato de la familia Friedman. Una familia ejemplar al que visitan las sombras en el trágico momento que el padre y uno de los hermanos son acusados de pederastia. Instantes en que todo se hace de noche. Se pone a prueba la fortaleza de la institución familiar: un enigmático padre que era un ejemplo en la comunidad, una madre exceptica huyendo, unos hermanos que se unen más en el infierno de la adversidad.
Todo ello es mostrado con frialdad y aplastante objetividad a través de los diferentes testimonios de los diferentes protagonistas. También vemos cómo la familia, en aquellos tristes días, fue capaz de filmar su propia desintegración sin saber que este material serviría para rescatar la memoria del horror y la incomprensión, para poner en tela de juicio los valores y las leyes de un país heterógeneo que anhela la ultraconservadora homogeneidad. Caiga quien caiga y pese a quien pese.
En conclusión, "Capturing the Friedmans" es la metáfora de la fatalidad cotidiana, el cuestionamiento honesto sobre las instituciones que nos defienden, la solidaridad incondicional con el padre y el amor emocionante del inmortal vínculo sanguíneo. Es además, la muestra sincera de la imágen como fuente para la Historia, del documento y la voz como exorcismo del alma atormentada por la intolerancia y la incomprensión de las opciones desconocidas. Sin olvidar que encarna como nunca se había visto la vida misma repleta de grises, de luces y sombras, de los secretos del padre y la imposibilidad manifiesta y cierta de conocer las aristas lejanas de nuestros amados semejantes.



FICHA TÉCNICA:

Dirección: Andrew Jarecki.País: USA.Año: 2003.Duración: 107 min.Género: Documental.Intervenciones: Arnold Friedman, Elaine Friedman, David Friedman, Seth Friedman, Jesse Friedman, Howard Friedman, John McDermott, Frances Galasso, Joseph Onorato, Abbey Boklan.Producción: Andrew Jarecki y Marc Smerling.Música: Andrea Morricone.Fotografía: Adolfo Doring.Montaje: Richard Hankin.Dirección artística: Nava Lubelski.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Oiga que el tipo al final era un pedófilo de tomo y lomo...

Running is Life dijo...

es su manera de verlo, yo lo veo de otra manera más sutil...